Las mujeres no esperan tu conquista barata 

Tengo la teoría de que, al menos en este lado del mundo, a las mujeres nos enseñaron que era mejor callarnos todo. Por otro lado, a ALGUNOS hombres les dijeron que estaba bien decir todo lo que se les pasara por la cabeza, así sin razonar. 

Hay una persona que me hizo sentir “incómoda”, por decirlo de una manera. Aunque hemos coincidido en algún espacio, no pasamos de los usuales “hola”, “adiós” y alguna conversación irrelevante. Ya saben, de esas que uno podría tener con alguien en una fila de banco o en el transporte público. 

Cuento todo esto porque imagino que su única forma de “conocerme” es haber escuchado alguno de mis comentarios o parte de mis conversaciones con otras personas. 

Un día de estos, esta persona se acercó y casi de buenas a primeras lanzó algo más o menos así: “¿Puedo hacerte una pregunta personal que espero no te incomode?”. Cuando alguien, que no es tu amigo o tu familiar, te dice algo así, casi siempre te incomodará. 

Quienes me conocen saben que mi cara puede decir perfectamente “vete a la mierda”, pero aún así prosiguió: “¿Cómo se conquista a una mujer como tú?”. Como suele suceder en estos casos, empecé a darle vueltas al asunto, como si hubiera hecho algo mal: “No sé, no es que haya una fórmula…. Mmm”. 

A pesar de mi evidente incomodidad, no se detuvo. “Es que tú sí eres de mente abierta ¿verdad?”, dijo. Yo: “Es que no sé…”. El resto de la conversación no la recuerdo bien, siento que medio desconecté y empecé a decir cosas para que dejara de hablar, mientras miraba a mi alrededor buscando una excusa para correr. 

¿Saben? Caí en cuenta que hace tiempo no convivía con cavernícolas y en parte se lo debo a mi círculo cercano, que es lo más top y me hace sentir protegida. Pero de que estas cosas se dan a diario, se dan. 

Aún no entiendo cúal fue la intención de la conversación, si fue inocencia, falta de experiencia, necesidad de convivencia o modus operandi. Lo que sí sé es que las mujeres no estamos esperando que nos conquisten al estilo 1492. 

Menos esperamos que los hombres usen “mente abierta” para tratar de decirnos “putas”, como claramente quedó evidenciado con su gesto. El contexto importa y no es igual que te lo diga un amigo a un desconocido. Que yo hable/escriba de estos temas con naturalidad no te da derecho a hablarme así. 

Me puse torpe, lo reconozco. Debí decirle esto último o algo más fuerte, pero me paralicé. 

También pensé en los hombres con quienes he tenido algo y fue porque siempre me hicieron sentir cómoda, linda, inteligente, etc. Supongo que ellos son de los que “enamoran” y no de los que “conquistan”, jaja. 

En algún punto de la conversación dijo: “Seguro tú, tan intelectual, no andarías nunca con alguien vacío de mente”. Honestamente, ¿qué más da? Uno tiene derecho a salir con quien le dé la gana, y nadie es más que nadie en esta vida. Pero igual, gracias por lo de intelectual.