«Si un libro no me atrapa desde las primeras páginas, me cuesta mucho seguirlo»

Ingeniera de profesión, narradora y poeta, Tania Hernández (Ciudad de Guatemala, 1968) tiene en su haber los libros de cuentos Love Veintediez, Desnudar santos, Cuentos para adultos fantásticos y Terciopelo y encaje, además de sus colaboraciones en revistas electrónicas como Te prometo anarquía y Gazeta.gt.

Recuerda los apuros que pasó Augusto Monterroso para deshacerse de 500 libros cuando se decide liberar espacio en sus libreras. Posee varias ediciones del libro más divulgado de Ana María Rodas y fijaría residencia permanente entre las ilustraciones del libro Últimos bailes de Günter Grass: Tania toma la palabra.  

¿Cuántos libros tiene tu biblioteca?
Más de 500. 

¿Cómo los tenés organizados: por autor, por temas, por áreas lingüísticas o indiscriminadamente?
Antes los tenía organizados, por guatemaltecos, latinoamericanos, literatura no latinoamericana y libros técnicos. Ahora están más mezclados.

¿Qué criterio seguís para comprar: un criterio racional, la recomendación de un amigo, las críticas que se publican, o te dejás llevar por el impulso?
Un poco de todo. A veces busco directamente un autor o autora de la que he escuchado, otras veces veo el libro en la librería y veo si me parece interesante. Otras veces busco un tema que necesite aprender. 

¿Qué hacés para controlar la superpoblación, la cantidad excesiva de volúmenes?
¿Has leído «Cómo me deshice de quinientos libros» de Augusto Monterroso? Pues así. En la ciudad que vivo hay libreras públicas en ciertas plazas. Cerca de mi casa hay dos. Así que los pocos que me animo a sacar los llevo allá.

¿Recordás el primer libro que leíste?
Los primeros libros que recuerdo que yo presté de la biblioteca del colegio fueron unos de unos dibujos que se llamaban algo como Barbapapá, y la serie de Pipi Medias Largas. 

¿Cuál es el ejemplar más valioso que poseés?
No soy muy buena para las jerarquías. Tengo varios muy queridos. Los libros que me regaló mi padre, los libros que me ha regalado mi novio, libros firmados por sus autores/autoras, entre ellos de Žižek, Saramago, libros que me han regalado personas cercanas, libros con una historia personal que tiene que ver con ellos, como La carne de Rosa Montero, Últimos bailes de Günter Grass, un libro firmado por Filóchofo y Cárcel de árboles de Rodrigo Rey Rosa. Y así, varios.

¿Cuál es el libro que más veces has releído?
Quizás Poemas de la izquierda erótica de Ana María Rodas y los libros de Humberto Ak’abal.

¿Qué te hace abandonar la lectura de un libro? 
Si un libro no me atrapa desde las primeras páginas, me cuesta mucho seguirlo. 

¿Qué obra famosa no terminaste de leer?
Rayuela y El hombre duplicado. Pero los tengo pendientes.

¿Hay títulos de los cuales tenés más de una edición?
Sí, Poemas de la izquierda erótica.

¿Tenés un lugar específico para los libros que escribiste o editaste, eso que podríamos llamar la egoteca?
No. Los tengo dispersos en el apartamento.

¿Leés sólo libros impresos o también electrónicos?
Ambos, aunque prefiero impresos. Electrónicos sólo si es necesario. 

¿Acostumbrás prestar libros a tus amistades?
De vez en cuando. No mucho.

¿Devolvés los libros que te prestan?
Casi siempre ;) Tengo dos libros que no he devuelto. 

¿Cuáles son tus hábitos de lectura? ¿Tenés un lugar y un horario fijos para leer?
Cuando desayuno, cuando estoy en alguna sala de espera, cuando voy en algún transporte público. Y a veces, que es lo más bonito, nos leemos mutuamente con Marco, mi novio. 

¿Acostumbrás subrayar y anotar los libros que leés?
No. Lo que hago es dejar separadores en páginas que me interesan.

¿Sos monógama para leer o leés más de un libro a la vez?
Casi siempre son varios al mismo tiempo. Pocas veces tomo un libro de principio a fin. 

¿Qué libro estás leyendo ahora?
El universo o nada de Elena Poniatowska y Amorosamente de Ruth Piedrasanta. 

¿Con qué personaje literario te gustaría tomar un café?
Charlotte, del libro del mismo nombre de David Foenkinos. El personaje está basado en la pintora judeo-alemana Charlotte Salomon.

Si pudieras quedarte a vivir en un libro, ¿en cuál lo harías?
Barcelona para cineastas ;), o Últimos bailes de Günther Grass. Es un libro de poemas con el tema del baile y con ilustraciones del autor de personas danzando. ¿Fue Nietzsche el que dijo que no podría creer un dios que no sepa bailar? Si alguien puede imaginar una eternidad, que no le falte la música ni el baile. Por cierto, ¿conoces el cuento «El episodio Kugelmass» de Woody Allen? Se trata de un profesor de literatura que entra en el libro de Madame Bovary.

Por último, si alguien quisiera iniciarse en la lectura y te pidiese ayuda, ¿qué diez títulos le recomendarías leer?
Primero preguntaría qué temas le gustan. Pero así en general:
Poesía: Kamoyoyik de Humberto Ak’abal, «Las falsas apariencias» de José Batres Montúfar, Quitapenas de Rosa Chávez
Cuento: Gato viejo de Marco Augusto Quiroga, La oveja negra de Augusto Monterroso, Cuentos de Eva Luna de Isabel Allende
Novela: Novecento y Seda de Alessandro Baricco
Biografías: Amantes y enemigos de Rosa Montero, Mujeres malas de María Hesse
Y por último uno de mi «egoteca»: Niñas inquietas, mujeres maravillosas que publicamos Marco Valerio Reyes y yo en Editorial Cultura. Lo hicimos con mucho corazón.