El disco dancer está muerto

Las influencias son como esos fantasmas que te persiguen a donde quiera que vas. No importa que te escondas en el último rincón del mundo o bajo la primera piedra que encontrés. Al final, uno es afectado por las cosas que mueven algo adentro de nosotros.

No me refiero solo al tema de las artes, creo que aplica para todo. En la música (porque eso es de lo que aquí hablamos) me parece que es bastante evidente. Uno puede detectar de alguna manera de donde vienen los sonidos de determinado grupo o solista. Creo que no hay nada nuevo por inventar, creo más en tomar lo que ya existe y llevarlo a otras dimensiones, hasta sus últimas consecuencias. Esto lo digo de la manera más positiva que se pueda decir, jamás como una crítica.

Celebro personalmente que bandas relativamente jóvenes, abracen esos sonidos que siguen estando presentes de bandas que han ido marcando el camino y que nos han regalado música increible.

Hoy hablo de influencias porque es precisamente de lo que está impregnado el álbum debut de 2010 de la banda londinense O. Children que lleva el nombre de una canción de Nick Cave; toma la influencia de los sonidos oscuros y melancólicos de Joy Division junto con una fuerte inclinación hacia el grandioso sonido Goth Rock que produjeron Sisters of Mercy y Fields of the Nephilim.

O. Children crean un sonido rico y atmosférico. En el que la voz del cantante principal TobiO'Kandi gruñe y se eleva destacando sobre el resto de los instrumentos. Cabe resaltar que es de los pocos vocalistas de color que he visto en el Post Punk, un género mayormente dominado por gente blanca.

La música que propone O' Children vendría siendo una especie de vástago entre bandas como Interpol o Editors, que han devuelto el sonido post-punk a la moda, junto con Joy Division (y, si se quiere, también a los primeros años de Bauhaus), para reinterpretarlos con sensibilidad actual y moderna. Algo que yo siempre considero muy acertada y fresco, volver a proponer canciones que tengan un agradable aire retro y que a la vez quieras volver a escuchar.

Apasionados con su música, los O' Children son una grata sorpresa a pesar de su muy corta discografía, solamente tienen en su haber dos discos. Un disco homónimo y Apnea. Es una lástima que la banda no sigue activa desde hace un tiempo. Pero es indiscutible la calidad de su música con tan corto tiempo de vida. Pero de algo estoy seguro y es que el fantasma de Ian Curtis debe estar muy orgulloso de su influencia durante tantos años. Yo así lo creo, aunque no necesito que se me aparezca para confirmarlo, me conformo con seguir escuchando a los O. Children

Para escuchar: Dead Disco Dancer, Malo, Heels, Fault Line, Ezekiel's Son, Ruins.

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