A mis 45

Tan difícil que Star-lord, en Guardianes de la Galaxia Vol. III, dijo: “En la Tierra, muchos mueren a los 50 años”. Eso significa que muy pocos todavía seguimos vivos en este planeta, felices y contentos.

Para mi, llegar a los 45 es motivo de celebración. A mis 7 años me veía a mis 45 como un viajero aventurero y soltero que conoce todo el mundo y no debía nada a nadie. Con una gran casa llena de objetos como un museo y un jeep Land Rover que subía montañas. Mi héroe de ese entonces era el Dr. Indiana Jones y cada uno de esos sueños fueron alimentados por mis libros -esos mismos amigos que todavía tengo-.

No he llegado a ser como este explorador, sino que ha sido mejor. Estoy casado con una persona que todos los días me impresiona y me sorprende. No he conocido todo el mundo, pero sí casi toda Guatemala. He recorrido cada uno de los 23 departamentos -incluyendo Belice-. No tengo un jeep pero si un carro que no gasta mucho y nunca me ha dejado.

Lo mejor de todo es que, junto a ella, vemos crecer a una persona que inspira, no sólo mi pseudónimo, sino que hace que nuestros días valgan la pena. Compartimos muchos momentos que bien valen la pena recordar en estos 45 años.

En estos 45 años he pasado de los discos LP, pasando por CD´s, MP3 hasta el Spotify. Inicié la escuela al mismo paso que mi Guatemala comenzaba su vida democrática. Vi la firma de los Acuerdos de Paz, desde los pasillos de la universidad vi el último fusilamiento de Guatemala (todavía recuerdo el tiro de gracia que le daba el teniente), viví el 9/11 desde la sala de reuniones de la agencia de publicidad donde trabajaba y sufrí el Serranazo al perder cuatro materias del colegio en ese año.

He cumplido el sueño de vivir en otro país. He superado el miedo de subir al escenario. Logré irme solo a México por tres días para solicitar una beca. He trabajado en lo que más me gusta y en lo que nunca me imaginé que iba a trabajar. He conocido los sitios más bellos y las residencias más elegantes de acá, pero también los sitios menos recomendables para conocer.

También he conocido a muchas personas que bien han valido la pena tener unos minutos con ellos. Roberto González Goyri, Efraín Recinos, Gaby Moreno, Luis Zea, Luis von Ahn… por decir algunos conocidos; pero también otros que marcaron más esta vida. Muchos que si los nombro podría dejar de mencionar algunos de forma inmerecida.

Pero lo más importante es que estos últimos 12 años no los he pasado solo. Estoy feliz de encontrar a ese amor que a muchos les cuesta encontrar o que nunca lo encuentran.  Juntos hemos pasado la pandemia, las enfermedades, las tristezas y, por supuesto, las alegrías. Todavía nos falta muchas cosas por realizar, por cumplir o por llegar a hacer, pero lo que me alegra es que podemos soñarlas juntas. 

Al final, el héroe no es el que se lleva el premio, sino el que disfruta su vida con sus altas y bajas. Desde hoy, con todas las ganas digo: ¡Bienvenidos los 45!