- Blog
- Publicado
- ¡Sé el primero en comentar!
- 1 a 2 min. de lectura
- Leído 1566 veces
La llorona: una cinta histórica o la narración de una leyenda
¿Qué si me gustó? ¡Bastante!
La Llorona es la última propuesta del director guatemalteco Jayro Bustamante. Filme que nos obsequia la oportunidad de ver un trabajo muy completo que entreteje parte de nuestras leyendas e historia. Pero ¿de qué trata?
Alma es una víctima del Conflicto Armado que se presenta en la casa del general Enrique Monteverde, justo cuando él está siendo sometido a juicio por crímenes de genocidio. Así empieza esta representación, o este limbo más bien, entre la realidad y la fantasía. Con tonos fríos y movimientos de cámara muy lentos y perfectamente trabajados, Jayro recrea bastante bien un ambiente de suspenso y angustia.
Los primeros minutos pegan de una forma impresionante, ¿y cómo no hacerlo? Ser testigo de la agonía eterna que sufre la comunidad indígena, mientras pide justicia quiebra, a cualquiera que esté familiarizado con la lucha de estos pueblos. Tras impactantes escenas que reviven uno de los juicios más mediáticos del país, hay un pequeño intervalo de tiempo en el que toca descifrar si lo que estamos viendo es una cinta histórica o bien, la narración de una leyenda.
Luego de esto, el director nos atrae de nuevo, proponiendo una serie de acontecimientos que combinan la agonía de un supuesto asesino con el sufrimiento perpetuo de una víctima de la guerra. Sin darnos cuenta, estamos embobados. Si bien las actuaciones se podrían considerar un poco planas para lo que acontece, hay momentos clave en los que ciertas miradas y posturas son suficientes para marcar el ritmo de la escena. Hay intensidad.
Lo que sin duda hace de esta película una joya es este realismo mágico que nos comparte. Una mujer real que llora y lleva consigo su dolor. Un coronel atormentado que sufre, o eso anhelamos creer, las consecuencias de sus acciones. Y a su lado, una angustiada familia que acompaña y duda.
¿Cuánto de lo que vemos en La Llorona es real? ¿Cuánto de lo que estamos presenciando quisiéramos que en realidad hubiese sucedido? Esta producción nos plantea muchas interrogantes, remueve el pasado y representa el dolor de un país que llora… sangre.
Véanlo, vale la pena.