- Las paredes hablan
- Publicado
- ¡Sé el primero en comentar!
- 1 a 2 min. de lectura
- Leído 314 veces
5:00AM y un café
¡Ring! Los sueños han terminado es momento de regresar a la realidad. Los párpados pesan como plomo, las piernas no responden ni los brazos pero es hora de despertar. El Sol no se ha levantado y nosotros ya vamos camino a la bañera, el tiempo sigue corriendo.
Una vez más te tardaste en la bañera y no te da tiempo de desayunar. Estás apurado, tu amigo que te da a jalón a la U te va dejar, porque 5 minutos tarde son 15 más de tráfico. Salís corriendo te despedís de tus padres y pareciera ser que no hay forma de hacer bien las cosas y a tiempo.
Una vez más se te volvió ha olvidar el trabajo de Filosofía, otra vez dejaste la tarea de Semiótica, pero no hay tiempo, hay que seguir. El tiempo avanza a velocidades increíbles, y si nos detenemos chocará contra nosotros con una fuerza impresionante.
Vamos tarde otra vez a clases, pero cómo explicarlo, las fiestas de fin de semana te dejaron agotado, ya no sos el superhéroes del primer año. Llegaste, entrás al salón de clase por la puerta trasera, te sentás y empezás a preguntar cómo estuvo el finde mientras el catedrático habla.
Pero sos responsable, volteas a ver al frente y el pizarrón se convierte en un dulce susurro que te hace recordás que debería estar dormido, pero no pasa nada. Te aguantarás el sueño, total siempre hay un café para despertar.
Edificio J, URL, 2003.