El Tecolote lleva a sus Mujeres al CAOS

Nota de archivo, publicada en septiembre de 2014

La muestra más reciente del Tecolote no tiene un orden específico. Esta vez, el Teco exhibe 80 piezas que entremezcla acuarela, tintas, acrílicos, técnicas digitales y grabados. Acerca del contenido, en esta colección también convergen erotismo y sensualidad –según publica la galería CAOS–, pero también amor y humor; “recuerdos, imágenes, y pasiones escondidas en el tiempo”, menciona Arnoldo Ramírez Amaya, conocido más en el arte com El Tecolote.

Y es por ello que en esta colección hace las veces de antología plástica con el tema Mujeres: “Incursiono en el género femenino sabiendo del peligro que sería caer en la cursilería. No le quise llamar retrospectiva porque resulta muy pretencioso. Pero hay grabados de 1967… es decir, son reminiscencias de otras épocas”, describe el artista. Sin embargo, la irreverencia y el cinismo con el que se le puede asociar (eventualmente) a Ramírez Amaya no está ausente: “Esto es una muestra que presenta un lado del artista que es el corazoncito. El romanticismo (ríe), como el tema es femenino no quise incluir ni vacas, ni burras, ni ratas, ni arañas, ni ranas… ni cucarachas (se carcajea). Aunque por ahí hay una rata... y también una mona lindísimas”.

40 años de historia
“Estas piezas son de las que evolucionaron aquellas. Aquellas se convirtieron en estas. Son 40 años de historias” menciona el artista mientras describe de pared a pared las piezas que están colgadas en la galería.

Acerca del fenómeno de la imitación y del legado artístico Amaya rememora: “Yo fui alumno de Roberto Cabrera, fue mi maestro y luego fuimos cuates. Esta exposición debería ser en homenaje a Roberto Cabrera, no porque se acaba de morir, sino porque cuando teníamos el estudio juntos, él hizo una serie que se llamaba Mujeres. Pero sería muy oportunista de mi parte agarrar el garlito del muerto”,  indica con un tono serio.

Luego de cambiar el tono en sus palabras hizo énfasis: “Pero escúcheme bien, sí voy a denunciar que mataron a Roberto Cabrera, a él lo envenenaron. No tengo pruebas pero están todos los síntomas de un crimen en su muerte. Yo estuve con él dos días antes. Él no estaba de muerte. Nadie se muere de los riñones de un día para otro. Cuando una gente está de muerte se le nota en la cara, la muerte aparece, en los ojos hundidos, la nariz, la piel, se nota cuando alguien está de muerte. Roberto estaba viejo, pero no de muerte, a él lo mataron”.

Cada pieza tiene su historia
“Estos son parte de un premio centroamericano y del Caribe del año 77. No exactamente estos. En el concurso había que presentar tres y estos son la cuarta serie… y este por ejemplo, es una pieza que está en mi libro, El pájaro sobreviviente está al final del libro, este es trabajo digital intervenido con color.

Esta es una serie de siete. Se llama la raza dormida, es un proyecto de escultura monumental y tengo tres porque los otros… no los encuentro. Esculturas de 70 metros. Son dos losas que se encuentran, con un tocoyal, con un perfil y la figura. Las hice pensando originalmente para ponerlas en el Cerro del Carmen. Es un trabajo más urbano. La vida moderna va dando parámetros obligatorios de referencia.

Aquellos maestros
En opinión de Amaya los cuatro grandes muralistas mexicanos son pintores. Hace énfasis en que lo único que separa México de Guatemala es una frontera pero fue hasta 1944 que los artistas guatemaltecos supieron de la revolución y el movimiento mexicano.

Antes de eso los artistas en el país eran impresionistas: “Es decir, retrasadísimo. Pero cuando nacen la generación del 44 aquí son grandes muralistas escultores. ¿Por qué? Porque los mayas eran escultores. Eso no es casualidad: Roberto González Goyri, Dagaberto Vásquez, Guillermo Grajeda Mena y Rodolfo Galeotti Torres, ellos son. ¿Cómo es que nadie se ha dado cuenta. Solo yo. Irónicamente les hizo la revolución y los promovió la liberación”.

Voz propia
Su trabajo es uno de los más imitados en el país. Hace poco hubo una exposición en la zona 14 y en mi opinión…
“Sí sí, ya sé de qué me va hablar. Un serotío que anda por ahí, un colochito hueco. Ahorita a ese chavo se lo voy a decir, lo voy a demandar por usurpación de personalidad porque ya me está jodiendo. Ese chavito, en algunas cosas ha sido mi ayudante… pero ahora se salió de la bacinica. Incluso me compró unos trabajos y no me los ha pagado y de eso ya fue como un año y medio. Si sigue así, lo voy a mandar a darle una su verguiada, yo no me ando con mierdas”. 

Dime con quién andas: Artistas guatemaltecos
“El arte es un antro de víboras. Así es el gremio. Hay muy pocas diferencias entre los artistas y las putas. Las putas de las barras shows se dicen bailarinas. Luis Cardoza dice: ‘prostitución no hay solo en la esquina de la calle. Sobre todo en las galerías de arte. Eso no es nuevo’”.

 Frase
“Viene a mi mente una cita que hace el poeta brasileño Vinicius de Moraes; a quien, Antonio Carlos Jobim musicalizó el poema La chica de Ipanema: ‘A mí; las feas que me perdonen, pero la belleza es esencial. Doy fe’”. Ramírez Amaya

Asista
La apertura de la muestra es hoy, desde las 19:30 horas. La exhibición permanecerá abierta al público de lunes a viernes, de 10:00 a 18:00 horas, hasta el 30 de septiembre. Previo a la culminación del evento, como propuesta de clausura el artista realizará públicamente retratos al minuto, esta actividad se llevará a cabo el día viernes 26 de septiembre a partir de las 19:00 horas. Galería CAOS  (17 calle “A” 7-15, zona 10).