VIDA ENTERA

REBELDE COMO YO

... Y te vi dormir y acompañé tu sueño;
sé qué soñabas y no fui parte de ello.

Despertaste y nunca llegué a ser tu dueño;
pero sé que soy tu dueño y me siento eterno,
eterno en un manantial de vida.

Pero solo soy un rebelde enamorado;
tan locamente enamorado como un riachuelo violento.

No importa si el camino es correcto,
lo correcto no es primero.

Acumularme en ti como esas partículas de polvo.
Como del polvo del que dicen te formaste.

Con esas formas tan perfectas que lograste,
tan perfectas como lo humano lo permiten.

Tan humana como yo,
tan rebelde como yo,
tan iguales los dos,
pero sin llegar a parecernos jamás.

Y te vi dormir y acompañé tu sueño;
y te besé.

Y desperté.

CIERTO DÍA

Era tanta la insistencia;
Era tanta la necedad.
Pasó el tiempo de la indiferencia y surgió de pronto...
Dos besos a medias que se convirtieron en uno.
Éxtasis total.
Caudal de ilusiones, caudal de deseos.
Y aquí estoy yo, maldita sea, conforme con la memoria.


VIDA ENTERA

Ahí están tus manos cansadas, talladas, curtidas por el tiempo, por la vida, por la responsabilidad, por el amor.
Un buen tramo de tu vida lo pasaste cuidando hijos.
Buenos, malos, regulares.

Un buen tramo de tu vida lo pasaste alimentando sueños, ambiciones, y los viste crecer y hacerse mayores.
Hoy sigues presente, brindándote sin exigencia alguna.

¿Y cómo hacerle para decir te amo?
Tal vez, solamente diciéndolo.

Quisiera arrullar tu cansancio, sanar tus malestares, darle más vida a tus ojos.
Ser la llama que sigue avivando tu intensidad de madre.

Y tan solo soy un hijo, un hijo muy orgulloso de ti.
Gracias por darme tu vida entera.