Sexo y alcohol, ¿son una buena combinación?

Iba a empezar esta columna con un “¿No les pasa que cuando beben les entran más ganitas de coger?”, pero luego recordé que yo siempre tengo ganas de coger, así que lo del alcohol no es un factor determinante. Creo que lo que pasa es que ingerir cierto grado de alcohol hace que te sueltes y pierdas un poco las inhibiciones, lo cual no siempre es malo. Especialmente si eres de las que siempre están algo tensas.

Según yo, sexo y alcohol son una buena combinación siempre y cuando no te pases… de cócteles. No sabría decirles cuál es la medida exacta, depende de cada cuerpo supongo, aunque creo que lo ideal es una cantidad que te relaje, pero no tanto como para convertirte en un bulto inconsciente. ¿Me explico? El chiste, tanto con la bebida como con el sexo, es disfrutarlos. Por si acaso, si no eres tan experta yo no le entraría a más de dos copas.

Yo antes creía que eso de que a los hombres les costaba tener una erección o no podían acabar después de haber bebido mucho era un mito, pero no.

Y no, amigos de 20 o 30, no es algo que solo les pasa a los cuarentones.

En todo caso, muy valiente te puede poner el alcohol, pero se me hace que nadie quiere dejar una mala impresión en su pareja o en su cita de Tinder.

Con las mujeres, el efecto también puede ser algo engañoso. Puede que el alcohol te haga sentir más dispuesta, pero eso no siempre se traduce en una respuesta fisiológica. Incluso diversos estudios señalan que el exceso de alcohol puede afectar la lubricación o provocar orgasmos menos intensos.

¿De verdad quieres eso?

Aunque el alcohol se usa como excusa desde tiempos inmemoriales, para justificar uno que otro acostón, yo sí creo que beber de más afecta tu buen juicio. De jóvenes, todos hemos dicho o hecho algo de lo cual nos arrepentimos, y a más de una nos ha tocado descubrir que la cruda moral es mil veces peor que la física. Nunca está de más decir que, pasarse de copas también puede significar otras malas decisiones, como dejar de usar condón.

Me da mucha risa cuando en las películas nos presentan esas cenas románticas casi estilo bufé, en la que cinco minutos después una pareja está cogiendo intensamente. Después de comer mucho, a mí lo único que me da es sueño. Ajá,

mal del puerco le dicen.

¿Cómo se puede coger con la barriga tan llena? Pues igual pasa con el alcohol. Y sí, que no les digan que la cerveza los hace mejores amantes, porque según mi experiencia lo único que produce en la cama son ronquidos más fuertes. Saludos A.

Vuelvo a que combinar sexo y alcohol no es para todos.

Beban si les gusta y con una persona que les gusta y que nunca usaría un par de copas en su contra. No beban para “animarse” a estar con alguien con quien no cogerían estando sobrias. No vale la pena desperdiciar ni el alcohol, ni el deseo. En todo caso, mejor sigan un consejo que escuché hace tiempo y que tomé por máxima:

mastúrbense antes de ir a una fiesta, así no cometen pendejadas.

¡Salud!