
- Literatura
- Publicado
- ¡Sé el primero en comentar!
- 1 a 2 min. de lectura
- Leído 332 veces
Corrupción
...
CORRUPTOS...
Tomaron el control de la directiva de la colonia. Todo iba bien hasta que vieron cuánta plata corría por esas cuentas, a las que solo ellos tenían acceso.
Hicieron un pacto. Sacar poquitos para cositas personales, nada que se notara durante el tiempo en el cual estarían ahí. Pero la codicia es un cáncer que avanza en la mente de las gentes y...
Esas cositas se fueron volviendo recurrentes y más necesarias, y los "jales" fueron aumentando en número y cantidades.
De pronto la colonia colapsó. Sin agua, sin servicios, sin limpieza, con la basura tirada por todos lados.
Los hijos de esos señores adinerados, tirando sus desechos en cualquier rincón. Los que pasan en carros caros tirando sus desechos en cualquier rincón. Los que alquilan y no saben qué es tener, tirando sus desechos en cualquier rincón...
El caos, y esos pocos con los bolsillos llenos, gastándose la plata de los que contribuyen pagando sus obligaciones.
La corrupción no es sinónimo de Estado, únicamente; la corrupción no es solo inherente a los políticos, policías o funcionarios.
La corrupción es sinónimo de sinvergüenzas que quieren hacerse ricos sin más esfuerzo que sus mañas a plenitud.
0-0-0
SEDUCCIÓN...
Mirada intensa como un huracán que arrasa; manos suaves, cual terciopelo, labios jugosos, como mangos maduros, besos con sabor a vainilla.
Cabello largo, autopista de mil sensaciones, bañando tus hombros como pincel sensual sobre tu piel. Caricias delicadas que te estremecen, que encienden el fuego de tu esencia y hacen fluir ese río fantástico de mujer.
Sonríes, parpadeas, dejas entreabierta la boca, me dejas besarte y me lanzo a la aventura de sentirte.
Te abrazo, te envuelvo, te pego a mí. Quiero tomarte para siempre, aunque para siempre tenga fecha de caducidad, porque así es la vida, simplemente.
Me seduces. Me encantas. Me fascinas.