Pero mi corazón está cansado, desgastado y maldito

Sin Título

Si alguna vez el amor nos encuentra de nuevo,

Deja que el silencio cubra nuestra verdad.
Quizás podría reavivarse también,
Pero arriesgando todo, me niego a hacerlo.

No te guardo rencor
Pero mi corazón está cansado, desgastado y maldito,
Porque cada latido parece ampliar
La grieta que yace entre nuestras manos,
Y crece con cada mirada.

¿Qué transmitieron todos mis actos?
Abrí mi alma, digas lo que digas.
Destinados a no encontrar de nuevo aquel camino,
Me pregunto por qué mi corazón se desviaría
Y se enamoraría de ti una vez más.

¿Cómo se renuncia a sueños no contados?
Esperando que no hayas leído lo que he escrito, seguiré contando.
Aunque me destrozaría ver
Que incluso entonces, retendrías mi amor,
Dejándome para lamentarme sola.

Quizás nuestro ocaso fue como una estrella fugaz, 
un enigma fácilmente resoluble.
Yo, inmersa en la oscuridad,
intenté recomponer nuestro lazo, 
aunque fuera en lo más íntimo y secreto,
mientras tú optaste por dejarle desvanecer.

¿Cómo puedes soportar
Dejar al corazón que aplastaste, esclavizaste…
El corazón que 
por ti cultivó sueños, 
naufragado en un mar de ilusiones?

A pesar del dolor que me embarga, 
aún anhelo tomar tu mano una vez más,
olvidar el amargo sabor de soltarla.

Eres el consuelo que busco cuando estoy triste,
Sin embargo, eres tú de quien me lamento, tanto.
Ya no puedo acudir a ti,
Puesto que eres la fuente de todo mi pesar,
Y no puedo encontrar la fuerza.